Descripción del blog


Este blog educativo está dedicado a la Historia del Arte en general, y a la Historia de las Artes Decorativas y el Diseño en particular. Apuntes de Fundamentos del Arte I y II. Resúmenes de Historia de la Indumentaria. Cine en el Arte, Arte en el Cine. Todos los textos han sido escritos por la autora del blog, Ana Galván Romarate-Zabala. Si los utilizas, cita las fuentes. Todas las imágenes contenidas en esta web tienen exclusivamente una intencionalidad didáctica. Si alguna imagen empleada vulnera derechos de autor, puede solicitar la retirada del material que considere de su propiedad intelectual. El contenido de mis artículos puede ser descargado libremente, pero por favor, cite la procedencia. Imagen que encabeza el blog: Un Bar aux Folies Bergère, Édouard Manet, c. 1882. Courtauld Institut, Londres. Fuente de la imagen: Wikimedia Commons. Public Domain

lunes, 30 de agosto de 2010

Arte y naturaleza en Croacia (II)



La isla croata de Mljet es un paraje paradisíaco pero inhóspito para vivir. Actualmente sólo habitan en esta isla unas 700 personas que viven fundamentalmente del turismo. La escasez de agua potable es uno de los principales problemas que tiene que hacer frente la población ya que los dos lagos que hay en esta isla son salados. Antiguamente eran de agua dulce pero ante la gran prevalancia de la malaria, decidieron comunicarlos con el mar, transformando así, su esencia dulce en salada.


Hay referencias a esta isla en la Odisea siendo supuestamente aquí donde Ulises, atraído por los encantos de la ninfa Calipso, pasó siete años.
Los romanos construyeron varias fortificaciones, pero la edificación más importante es de época medieval: un monasterio benedictino dedicado a Sta. María.

Mljet es un parque natural, reserva de la Biosfera, donde podemos disfrutar de la vegetación tipicamente mediterránea y de numerosos animales. En estas tierras abundan los jabalíes que en ocasiones se bañan en los lagos que circundan esta zona -aunque yo no ví ninguno-. En esta isla eran muy frecuentes las víboras y todo tipo de serpientes y por ese motivo importaron de la India mangostas, especie parecida a la comadreja, que acabaron con esos peligrosos reptiles.

La preciosa isla de Korkula desde el año 1000 fue disputada por la República de Venecia, por eso su influencia es evidente por toda la isla. Su urbanismo está hecho en función del viento, está orientada este-oeste para evitarlo en la medida de lo posible.



La Basílica de Korkula, se llama, como no podría ser de otra manera, San Marcos y está fechada entre los siglos XIII-XV. Fue realizada por artistas locales bajo influencia italiana. Presenta leones rampantes en la portada y unas curiosas esculturas que representan a Adán y Eva.

Según algunos historiadores, el mítico viajero Marco Polo (siglo XIII) nació aquí; mientras que otros consideran que fue en Venecia. Sea como fuere, Korkula por aquel tiempo era territorio veneciano. Se conserva una casa-torreón-museo ruinosa que llaman "de Marco Polo".

Korkula está lleno de callejuelas pintorescas con mucho encanto.

Camino a Sibenik, encontramos paisajes inolvidables.



En la ciudad costera de Sibenik encontramos su catedral de Santiago, Patrimonio de la Humanidad, muy reconstruida tras la guerra de 1991-95 que afectó gravemente a esta ciudad.


Construida en piedra caliza y mármol, fue realizada en estilo renacentista de influencia italiana, en este caso, toscana.


Un detalle de su bellísima y reconstruida portada con los consabidos Adán y Eva.

Cerca de Sibenik, tierra adentro, se encuentran las espectaculares cataratas de Krka.





martes, 24 de agosto de 2010

Arte y naturaleza en Croacia (I)



Considerada como "el mejor destino turístico del mundo" según el editor mundial de guías de turismo Lonely Planet, Croacia es un impresionante país donde se funden a la perfección la naturaleza con el arte. Hoy es un estado independiente después de que se desintegrara la antigua Yugoslavia, un mosaico complejísimo de pueblos, etnias y religiones muy diversas de difícil convivencia: Croacia (católicos), Serbia (cristianos ortodoxos), Montenegro (cristianos ortodoxos), Eslovania (católicos) y Bosnia Herzegovina (musulmanes).

Conocida como "la perla del Adriático", Dubrovnik se encuentra en la región croata de Dalmacia y es una de las ciudades más visitadas y turísticas de toda la zona. Está bastante reconstruida tras la última guerra de los Balcanes de los años 90 (1991-95) en la que sufrió los bombardeos del ejército yugoslavo, de los serbios y de los montenegrinos.


Dubrovnik presenta orígenes grecolatinos y eslavos, siendo una pujante ciudad en época medieval y renacentista. Durante siglos fue una especie de ciudad-estado, lo cual no fue óbice para que sufriera continuas invasiones y ataques de diversos pueblos, provenientes tanto de oriente como de occidente. Dubrovnik como el resto de Croacia y buena parte del Adriático, estuvo bajo el influjo de la República de Venecia, por eso la influencia veneciana es omnipresente. Es lo que el profesor francés Paul Fattal denomina como "el perfume de Venecia": es particularmente evidente en la arquitectura con los vanos típicamente venecianos, la presencia de los leones alados, símbolos de San Marcos y de la propia Venecia...

En el siglo XVII comenzó su decadencia. A lo largo de los siglos, esta ciudad denominada hasta 1916 como Ragusa, ha sufrido innumerables terremotos -está en una zona muy compleja de tectónica de placas- e incendios. Así por ejemplo, por estos motivos su catedral de la Asunción tuvo que ser reconstruida tres veces. Si bien en sus orígenes fue medieval -según cuenta la leyenda los gastos de su construcción fueron sufragados por Ricardo Corazón de León tras sobrevivir a un naufragio en aguas del Adriático al volver de las Cruzadas-, la que se conserva hoy en día es de estilo barroco.

Dubrovnik abunda en ejemplos de arquitectura medieval, renacentista y barroca. Así por ejemplo, de la etapa medieval destacan los conventos de los Dominicos y los Franciscanos. Ambos edificios sufrieron bastantes destrozos en la Guerra de los Balcanes de los años 90.
El convento de los Dominicos es uno de los edificios más hermosos de esta ciudad. Data del siglo XIV y consta de una iglesia gótica y un interesante claustro y museo donde se conservan varias obras de arte de gran interés, como un crucifijo gótico realizado por Paolo Veneciano. Este edificio presenta añadidos renacentistas y barrocos.

El Convento de los Franciscanos cuenta con una farmacia considerada una de las más antiguas de Europa (siglo XIV).

Los destrozos de la guerra de los Balcanes son bien patentes en este convento:

Aquí podemos ver la huella de un misil que cayó en este convento el 6 de diciembre de 1991:

La influencia veneciana es palpable en muchos edificios como en el Palacio Sponza, de estilo gótico-renacentista en el siglo XVI. Hoy es el archivo histórico de la ciudad.

Hay numerosas fuentes por toda la ciudad -el agua sale fresquita y buenísima-, como la fuente renacentista de Onofre, cuya cúpula fue destruida durante el asedio a esta ciudad en la última guerra. La iglesia del fondo presenta una tipología muy habitual en Venecia, me recuerda a las iglesias de una única nave venecianas, como la iglesia de Santa María de los Milagros de la ciudad véneta.

Otra fuente de la ciudad, en pleno casco histórico, infestada de palomas, que por cierto, tanto daño hacen al patriomio artístico, en concreto a la arquitectura. Al fondo a la izquierda, un detalle de una portada manierista con las columnas tipicamente serlianas.


La iglesia barroca de San Blas, dedicada al santo fundador de la ciudad y figura muy habitual en el arte de Dubrovnik.


La iglesia de San Ignacio, responde a la tipología de iglesias jesuíticas barrocas. Se alza sobre la ciudad, en la parte alta de la misma. Fue realizada por Andrea Pozzo, el mismo arquitecto que intervino en la iglesia de San Ignacio de Roma. En su interior se conservan espléndidos frescos barrocos realizados por el pintor siciliano Gaetano García.


Como vemos, los edificios son mayoritariamente de piedra, material muy abundante en Croacia.

Frente a la ciudad de Dubrovnik podemos hallar la isla de Lokrum, que perteneció al emperador Maximiliano de Austria que construyó allí un palacio. También se conserva un monasterio benedictino y un jardín botánico.


En Croacia al parecer no rige la ley de costas y podemos encontrar hoteles, restaurantes, etc. en primera línea de playa.


miércoles, 18 de agosto de 2010

Arte y Arquitectura en Italia: BOLONIA


En la región italiana de Emilia-Romagna, a los pies de los Apeninos, en una de las tierras más fértiles de Italia, se encuentra la bellísima ciudad de Bolonia, conocida por los italianos como "la rossa, la grassa, la dotta", por razones obvias. La "rossa" por el color de sus edificios y al parecer, la inclinación izquierdista de su población.

La "grassa" porque esta ciudad y su región son la cuna de la famosísima mortadela así como del queso parmiggiano reggiano, el ragú, los tagliattelli alla bolognese–que no spaguetti- y de mil delicias más no aptas para gourmets con el colesterol alto. También es muy conocida por un vino sobrevalorado, el Lambrusco, así como por sus tortellini, cuyos precio desorbitado, al menos en el Mercato di Mezzo donde llegan a alcanzar más de 30 euros el kilo, parece explicarse porque según ellos, proceden del ombligo de Venus.
Por último, pero no menos importante, se la conoce también como la “dotta”, es decir, la culta, porque, como se ufanan los boloñeses en repetir, en ella surgió la primera universidad de Europa, en concreto en el año 1088. Por sus aulas pasaron a lo largo de los siglos, personajes célebres como Thomas Becket, Paracelso, Raimundo de Peñafort, Dante Alighieri, Francesco Petrarca, Pico della Mirandola, Leon Battista Alberti, o Copernico. Ayer como hoy, su célebre universidad sigue atrayendo a muchos estudiantes –muchos de ellos del proyecto Erasmus- y ha sido uno de sus más destacados profesores el genial escritor y semiólogo Umberto Eco.




Ligado a la universidad, encontramos el célebre Colegio de España (siglo XIV), realizado bajo protección regia y donde estuvieron alojados Carlos V, Elio Antonio de Nebrija, San Ignacio de Loyola, Cervantes, etc...


El apodo de la “dotta” no es casual, no hay más que comprobar la abundancia de librerías de esta ciudad, verdaderamente apabullante, cerrando sus puertas algunas de ellas de madrugada.


Etruscos, romanos, godos, bizantinos, longobardos... numerosos pueblos fueron marcando a sangre y fuego la historia de esta ciudad que durante siglos formó parte de los Estados pontificios. Tras la era napoleónica y el dominio austríaco, Bologna, por fin, se unió al resto de Italia en la segunda mitad del siglo XIX. Recordemos que la unidad italiana sólo se alcanzó en el siglo XIX, en torno a los años 1860-70. Bolonia sufrió gravemente los envates de las guerras mundiales, particularmente de la segunda. De hecho hay toda una Bolonia subterránea –visitable- en relación con estas guerras.
El boom económico e industrial a partir de los años 60 supondrá un desarrollo espectacular para la zona, una región muy industrial y comercial, con un centro de Ferias de gran importancia proyectado por los arquitectos Benevolo, Giuralongo y Melograni (1964-65). No lejos de Bolonia se encuentran varias industrias automovilísticas muy destacadas como la Ferrari en Maranello, con su célebre icono del diseño, il cavallino rampante y la Ducati.



Las huellas medievales y renacentistas de la ciudad son visibles en muchas de las calles boloñesas, así como sus más de 50 kilómetros de sus emblemáticos pórticos que recorren la ciudad en todas sus direcciones. En estos pórticos antiguamente se celebraban actividades artesanales y comerciales. De sus más de cien torres del medievo, sólo quedan unas decenas, siendo las más destacadas las torres de Asinelli y Garisenda en pleno casco histórico.




En la Plaza Mayor se alza majestuosa la catedral de San Petronio. De fachada inacabada, es una iglesia gigantesca que puede acoger hasta 50.000 fieles. Empezada en el siglo XIV, durante el Quattrocento Jacopo della Quercia realizó la portada escultórica. En esta iglesia Carlos V fue coronado emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico el 24 de febrero de 1530. Pocos años después, en este templo se celebraron dos sesiones del Concilio de Trento. A mi modo de ver, lo más intersante de esta catedral son las pinturas del juicio final, sobre todo del infierno, de Giovanni da Modena (1410-1415). Son inevitables las comparaciones con el infierno de Giotto en la no muy lejana Cappella degli Scrovegni de Padua.




En la Plaza Mayor, corazón político y religioso de la ciudad, abundan los palacios medievales como el Palazzo del Podestà, el palazzo del Re Enzo, la torre del reloj, etc. En esta plaza, todas las perspectivas parecen confluir en la espectacular escultura manierista de Neptuno realizada por el escultor Giambologna (1567). Conocida popularmente en Bolonia como "el Gigante", esta divinidad aparece con su símbolo parlante: el tridente. Se ha interpretado como un símbolo del papado ya que fue erigida por voluntad del cardenal Carlo Borromeo a instancias del pontífice Pío IV : el dios que aplica las aguas, es como el Papa que pacifica sus territorios -y Bolonia era uno de ellos. En la base de la escultura encontramos diversos putti y nereidas que cabalgan sobre delfines. Por ellos brotan los chorros de agua.
Durante las dos guerras mundiales, la escultura de Neptuno fue guardada en un lugar seguro para preservar su seguridad.



Una de mis plazas favoritas de Bolonia es la de Santo Stefano, una plaza porticada que se abre a un complejo de varias iglesias medievales que se alzan sobre restos de templos romanos, que rememoran los santos lugares de la Pasión de Jesús en Jerusalén, siendo muy destacable la basílica del Santo Sepulcro.







En cuanto a esculturas, aparte de la maravillosa del Neptuno, destacan las de Niccolò dell´Arca en la iglesia della Vita con su dramático Llanto sobre el Cristo muerto (siglo XV). Realizado en el siglo XV en terracota, todavía presenta restos de policromía.






En Bolonia se conservan varias esculturas de Miguel Angel en el sepulcro de Santo Domingo de Gúzman en la iglesia homónima: San Petronio, San Procolo y uno de los dos ángeles que portan una vela. El resto de las esculturas de esta impresionante "Arca" fueron realizados pors en época medieval porel taller de Nicola Pisano (siglo XIII) y de Niccolò dell´Arca (1473).


























Entre los museos de Bolonia descuellan el Museo Civico Arqueológico, la Pinacoteca Nacional que custodia pinturas medievales, renacentistas y barrocas, el museo de Giorgio Morandi y el Museo de arte moderno, llamado MAMBO.


Finalmente, en la porticada via Castiglione, una de las más sugestivas y antiguas de la ciudad, se encuentra posiblemente la mejor heladería de la ciudad, denominada con el mismo nombre que la calle en la que se encuentra.